Una de las Denominaciones de Origen del vino, quizá, menos conocidas de España, o al menos lo era para mí, es la de Almansa. Ocupa una importante extensión del este de la provincia de Albacete que comprende ocho municipios, entre los que el más famoso, y del que toma nombre la DOP es Almansa. Sin embargo, como verás, son muchas las localidades que ofrecen al visitante una experiencia completa. Las bodegas son el punto de partida de un viaje único por la cultura, el patrimonio natural y la tradición de esta comarca. ¿Te animas a descubrir con nosotros la ruta del vino de Almansa?
Ruta del vino Almansa: única
La Denominación de Origen Almansa, se fundó en 1966, pero la tradición del vino en la zona es muchísimo más antigua y buena cuenta de ello dan sus bodegas y viñas, algunas, incluso, centenarias. Se conoce el cultivo de uva en la zona al menos desde el siglo XVI, aunque, probablemente sea anterior. La principal variedad de uva que se utiliza en la D.O. Almansa es la Garnacha Tintorera, una variedad única en España y prácticamente en el mundo ya que solo encontrarás algo similar en una región de Italia y otra en Ucrania. Este tipo de uva, tinta en su interior, consigue vinos con una intensidad única en cuanto a su color, muy potente que te hará disfrutar de vinos muy originales y personales.
Por supuesto, aunque la principal uva es la Garnacha Tintorera, los bodegueros utilizan otras variedades que van desde la Monastrell a Merlot pasando por otras uvas de larga tradición y fama como la Cabernet Sauvignon o Syrah. Otra de las características de esta DO es la altura, muchas de sus viñas se encuentran a una altitud sobre el nivel del mar de entre 900 y 1.000 metros, aportando a sus vinos una ligereza especial y característica.
Pero la Ruta del Vino Almansa es mucho más que una denominación de origen y varias bodegas, es un grupo de personas, establecimientos e instituciones que luchan por su territorio para hacerlo atractivo al turismo enológico, cultural y patrimonial. Aunque son 11 las bodegas que pertenecen a la Denominación de origen Almansa, solo 7 participan en la Ruta del Vino de Almansa y en este post las vas a conocer a todas ellas ya que tuvimos la suerte de visitarlas y disfrutar de sus vinos.
No sólo de vino vive esta ruta, porque si la visitas descubrirás una gastronomía muy interesante que mezcla la vanguardia con la tradición en restaurantes como El Pincelín de Almansa, +Ideas en Higueruela o Los Arcos en Alpera entre otros. Todos ellos recomendables y recomendados para formar parte de las experiencias gastronómicas de la zona. Además de platos suculentos y vinos especiales, la ruta del vino Almansa, ofrece al visitante cultura arraigada en el territorio, en el que durante milenios el hombre ha ido dejando su huella a través de las magníficas pinturas rupestres de la Cueva de la Vieja en Alpera, las alquerías de origen árabe, los castillos medievales o las casonas barrocas. Sumérgete con nosotros en esta zona de la España menos conocida.
Las bodegas de la Ruta del Vino Almansa
Dominio de Casalta – Pepe Rodríguez de Vera
Pepe Rodríguez de Vera es el enólogo y fundador de la bodega Dominio de Casalta en 2010, cuando inició este magnífico proyecto. Los viñedos de esta finca familiar desde hace ya 7 generaciones, cuenta con 22 hectáreas de terreno que se ubican a unos 1.000 metros de altura sobre el nivel del mar, con un clima muy oscilante, ya que se produce una gran variación térmica entre el día y la noche en muchas estaciones del año.
En esta magnífica finca hay un ejemplar singular, la famosa Carrasca, un árbol centenario que cuenta con más de 700 años y ha acompañado estas viñas desde el inicio de su producción. En la finca Casalta se cultivan siete variedades de uva, en la que, por supuesto, destaca la Ganacha tintorera y la Monastrell. El vino de Pepe Rodríguez Vera tiene un estilo muy personal, en el que lo que se destaca es la propia viña, el interés por que lo que sea que hable en sus vinos sea la propia viña con una mínima intervención.
Toda la producción de Pepe Rodríguez es muy singular, predomina el acento en las viñas con identidad propia sea en la ruta del vino Almansa o en otras denominaciones en las que trabaja como Jumilla, Toledo, Rueda o Toro. No dejes de probar su serie limitada Dominio de Casalta tinto de 2010 que cuenta con 91 puntos en la Guía Peñín y sus blancos.
Tintoralba
El origen de la Bodega Tintoralba de Higueruela es la antigua Cooperativa Santa Quiteria de Higueruela fundada en el año 57 del siglo XX. Se trata de una de las bodegas más grandes de la zona ya que en ella se integran más de 200 viticultores para elaborar un vino que de forma conjunta represente los valores de la antigua cooperativa a través de una producción de calidad y con la tecnología más moderna.
La mayoría de sus vinos descansa en barricas de roble francés, aportándole ese toque de elegancia de esta madera. Solo uno de sus vinos, pero esto tendrás que descubrirlo, descansa en roble americano, aportándole un sabor diferente… Pero la última tecnología llega a la ruta del vino Almansa a través de esta bodega ya que utilizan las últimas técnicas como los ovoïd. ¿Has oído hablar de ellos? Se trata de depósitos con forma ovoidal que aporta muchísimas ventajas al proceso de vinificación ya que gracias a su forma los vinos se mueven de forma natural y prácticamente solos.
Como la mayoría de las bodegas de la DO Almansa una buena parte de su producción se marcha al extranjero, llegando a países tan lejanos como Japón o los europeos Suiza, Alemania… Por supuesto, sus vinos, de una altísima calidad pueden encontrarse, sobre todo, en enotecas y vinotecas en las grandes ciudades españolas. No dejes de preguntar por su vino Casillas, personalmente uno de los que más me ha gustado de la ruta del vino Almansa y por su dulce. Son la única bodega de la zona que produce vinos dulces y son espectaculares.
Bodegas Piqueras
Bodegas Piqueras, situada en Almansa, es otra de las bodegas tradicionales de esta ruta del vino. Se trata de una bodega centenaria ya que fue fundada en 1915. Durante décadas han elaborado vino de gran calidad con las dos variedades de la DO Almansa. Sus viñas casi centenarias aportan a sus vinos, tintos y blancos, una concentración de minerales y color única.
En la actualidad, esta bodega está regentada por la cuarta generación de bodegueros, una familia que ha representado el esfuerzo de su tierra a través de sus vinos. Curiosamente, como algunas otras bodegas en la zona, uno de sus vinos está dedicado a sus ancestros. Se trata de sus vinos, hay varios, El abuelo, muy fácilmente reconocibles por la imagen de su botella. No te pierdas su vino Los Losares que cuenta con numerosas menciones como la Gran Oro Gilbert Gaillard con 93 puntos.
Bodegas Cano
Si hablamos de tradiciones en la ruta del Vino Almansa tenemos que hablar de Bodegas Cano en Higueruela. La bodega se funda hace más de 160 año, en 1860 y, en la actualidad, todavía está en manos de la misma familia gestionada por la quinta generación de la misma. Durante algunos años, entre los años 50 y 60, la familia volvió a formar parte de una cooperativa, pero el recuerdo tradicional hizo que hace 20 años volviera a reabrir con más personalidad y unicidad que nunca.
Una de las principales características de esta bodega es la elaboración de sus vinos, todos con certificación ecológica, que envejecen en tinajas de barro tradicionales. Las tinajas han pertenecido a la familia desde su fundación por lo que han conseguido una producción única y con mucha personalidad que, además, es totalmente sostenible con el entorno.
Pero no todo es tradición en Bodegas Cano ya que hace unos meses tan solo, se han embarcado en una nueva aventura relacionada con sus vinos con la apertura de una vinoteca. La Vinoteca de Sinforiano en Higueruela es un espacio con muchísimo encanto, en el cual hay una zona de terraza al aire libre perfecta para disfrutar del verano y un interior donde se pueden ver sus tinajas tradicionales. Si te acercas a ellas podrás ver, pero no se toca, los apuntes de los abuelos de la familia. Disfruta de un Perturbado en la vinoteca, un 1860 blanco (cabernet sauvignon) o, lo más original, un vermout de elaboración propia.
Hacienda El Espino
La bodega Hacienda el Espino, fundada en 2002 por Paco Milán, es una de esas bonitas extensiones de terreno en las que no sólo destacan sus viñas si no también el edificio principal y sus caballerizas. Desde sus fundación hace poco más de 20 años, en una viña de los años 90, el esfuerzo de la familia Milán ha hecho que sus vinos tengan una gran proyección no solo nacional si no también internacional como demuestran sus varios premios.
La Hacienda el Espino se encuentra en las afueras de Almansa, en un precioso entorno natural con vistas al Mugrón, un alto corredor con más de 1200 metros de altitud. Una de las curiosidades de esta viña es que aquí, en esta extensión, durante el inicio del siglo XVIII (en 1707) se llevó a cabo una de las batallas más famosas de España durante la Guerra de Sucesión española.
Su producción, centrada en el vino pero con parte de olivar, es totalmente ecológica, creando un ecosistema a partir de sus viñedos y algunas hectáreas de pinar en donde se pueden encontrar numerosas especies animales. Su amor por la fauna también se encuentra dentro de la finca, con unas maravillosas caballerizas que acogen a preciosos caballos de raza española. No te pierdas los vinos que homenajean la batalla como 1707 Centenario o el propio Batalla de Almansa de 2027.
Bodegas MataMangos
La bodega lo era desde el año 1704 cuando un indiano volvió a Almansa acompañado de su esposa cubana a quien le construyó el precioso palacio que hoy es el corazón de Bodegas Mata Mangos. El palacio, cuando la familia actual se hizo con la bodega en torno a 1994, llevaba unos 100 años completamente abandonado, desfalcado y expoliado. El magnífico palacio, había más de 50 habitaciones de servicio, a si qué podéis imaginaros las dimensiones.
El curioso nombre, quizá, se intuye que pueda aludir a la planta del mango, muy poco habitual en esta ruta del vino del Almansa, pero que considerando la proveniencia de la primera dueña de la fina podría tener relación y sentido. Lo que si es cierto, es que en la hacienda, hay un camino llamado así: Mata Mangos y es de este que la bodega toma su original nombre.
El viñedo, unas 50 hectáreas dentro de las 200 que ocupa la finca, se sitúa entre 850 y 900 metros de altitud y las viñas, viejas, hunden sus raíces en los estratos más profundos para alimentar a los vinos haciéndolos fuertes en minerales. La conservación se realiza en el interior del complejo que, como hemos dicho, se remonta al siglo XVIII. Gracias a la antigua construcción, de grandes muros, la temperatura es constante durante todo el año, permitiendo un reposo de los vinos a unos 15 grados de temperatura tanto en invierno como en verano. La producción de esta bodega es totalmente ecológica, estricto secano y totalmente manual . Las viñas más antiguas, fueron plantadas en los años cuarenta por los abuelos de los actuales dueños de la bodega.
La producción de esta bodega es la más pequeña de la Ruta del Vino Almansa, en torno a unas 25.000 o 30.000 botellas anuales. Sin embargo, no es la cantidad lo que se valora en el mundo del vino y los suyos tienen todas las buenas características de esta denominación de origen y algunas otras particulares que les hacen únicos.
Bodega Santa Cruz de Alpera
70 años de experiencia en producción de vino hace de las Bodegas Santa Cruz de Alpera un referente en la Ruta del Vino de Almansa. Su origen se remonta a los años cuarenta del siglo XX cuando varios viticultores fundan una cooperativa para mejorar la elaboración de sus vinos. En la actualidad es una bodega moderna que cuenta con unas 3.000 hectáreas de producción de las que en torno a la mitad es totalmente ecológica. Dos de sus gamas de vino han puesto el acento sobre la importancia de los cultivos ecológicos, sostenibles y producen vinos veganos.
Son muchas las variedades de uva tinta que utilizan en la elaboración de sus vinos, entre ellas merlot, tempranillo, syrah, pero, por su puesto, el 90% de su producción es la garnacha tintorera, la variedad insignia de esta DO. Entre sus vinos puedes encontrar grandes vinos como Rupestre, altamente reconocido en varios certámenes. Se trata de un vino equilibrado, con aromas de grosella, fruta del bosque muy madura con una tanicidad aportada por el roble americano que hace de este un vino muy completo con una tonalidad de color muy alta.
Por cierto, si los visitas pregúntales por su rosado Albarroble, con un color muy característico y una presencia única. Y si quieres sorprender, pásate por su tienda para descubrir vinos verdes o azules, sin duda, una bodega con mucho color.
Qué ver en la ruta del vino Almansa
Aunque probablemente, más adelante, os contemos en profundidad qué ver en la ruta del vino de Almansa en otro post dedicado al arte y el patrimonio de la zona, no podemos dejar de hacer una breve reseña de algunos de los lugares en los que estuvimos a lo largo de estos días tan intensos.
Alpera
Alpera es un encantador municipio dentro de la Ruta del vino Almansa que destaca por su riqueza histórica y natural. Uno de los principales atractivos turísticos es la Cueva de la Vieja, un conjunto de pinturas rupestres declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Estas representaciones de arte levantino, situadas en un entorno natural de gran belleza, permiten a los visitantes viajar al pasado. Se trata de un abrigo en la roca que atesora cerca de 200 figuras pintadas a lo largo de miles de años por los cazadores recolectores que poblaron la zona de las sierras alrededor de Alpera durante siglos. Lo más curioso es que hay varios tipos de representaciones, desde el arte esquemático más abstracto y simple en sus trazos a bellísimos ejemplos de arte levantino.
Otro punto destacado es la iglesia parroquial de Santa Marina, construida en el siglo XVI, que impresiona por su arquitectura gótica. Y no te vayas de Alpera sin descubrir su pozo de nieve, una estructura creada y utilizada para mantener el hielo conservado durante muchos meses del año. En este caso, se trata de uno de los más grandes de la Península Ibérica y además fue declarado Bien de Interés cultural en el año 2010. Alpera es también parte de la Ruta del Vino Almansa, por lo que puedes disfrutar de visitas a bodegas locales que hemos nombrado anteriormente como la Bodega Santa Cruz.
Higueruela
Higueruela, conocido por sus campos de energía eólica, guarda una esencia manchega que combina tradición y modernidad. Entre sus principales atractivos destaca la iglesia parroquial de Santa Quiteria, un hermoso ejemplo de arquitectura popular del siglo XVIII. En lo alto del municipio hubo un castillo del siglo XIII que se encuentra totalmente abandonada. Sin embargo, las excavaciones arqueológicas cercanas a la localidad son muy interesantes, ya que han permitido descubrir algunos restos de poblados íberos y romanos y algunas alquerías árabes testigos de la historia de esta comarca. Sin lugar a dudas, uno de las visitas más curiosas que hicimos en estos días fue la de la Alquería de La Granja de Higueruela.
La alquería medieval de La Graja se situaba al norte de Higueruela entre encinas, coscoja, sabinar y matorral. Se trata de una granja que proveyó de diferentes productos a algunas ciudades como, en el caso de esta alquería, a Chinchilla, una medina importante en la época de la ocupación árabe. Fundamentalmente, en esta alquería vivía una comunidad ganadera que proveía de lana a Chinchilla para su importante producción de alfombras. Aunque la importancia de esta producción siguió durante años, la alquería podríamos decir que igual que apareció en torno al año 1000, desapareció unos 100 años después, probablemente por su falta de defensa en una época convulsa. A día de hoy, algunas de las casas de la granja han sido excavadas junto con la mezquita central y algunas calles. Una visita muy interesante para aquellos a los que nos gustan los yacimientos arqueológicos como el de Tiermes en Soria, el de Segóbriga en Cuenca, etc.
Almansa
Almansa es una ciudad llena de historia y encanto que fascina a todos los que la visitan. El Castillo de Almansa, una de las fortalezas más impresionantes de Castilla-La Mancha, domina el horizonte desde lo alto de una escarpada roca. Construido originalmente en el siglo XII y ampliado durante los siglos posteriores, especialmente bajo dominio cristiano, este castillo combina elementos de arquitectura musulmana y gótica. Su estratégica ubicación en la antigua frontera entre los reinos de Castilla y Aragón lo convirtió en un bastión crucial durante la Reconquista y en siglos posteriores. Los visitantes pueden explorar sus torres, murallas y patios, además de disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad y el paisaje manchego.
La Batalla de Almansa, librada el 25 de abril de 1707, es uno de los episodios más significativos de la Guerra de Sucesión Española. Este enfrentamiento enfrentó a las tropas borbónicas, lideradas por el Duque de Berwick, contra el ejército aliado formado por fuerzas anglo-holandesas y portuguesas que apoyaban al archiduque Carlos de Austria. La victoria borbónica en esta batalla fue decisiva para consolidar a Felipe V como rey de España y marcó un punto de inflexión al inclinar la balanza en favor de los Borbones. Sin embargo, esta batalla va mucho más allá de lo que nos cuentan en los libros de historia, os aconsejo que visitéis el centro de Interpretación de la Batalla de Almansa, donde os contarán los aspectos que hacen de esta un punto de inflexión en la historia española y en la idiosincrasia de la política de nuestro país.
Otro imprescindible es la iglesia de la Asunción, un magnífico ejemplo del Renacimiento español, a su lado el palacio de los Condes de Cirat, hoy sede del Ayuntamiento y el monasterio de las Agustinas. Almansa también forma parte de la Ruta del Vino Almansa, lo que brinda la oportunidad de recorrer bodegas galardonadas y descubrir la tradición vitivinícola de la región. Además de su patrimonio monumental, Almansa es conocida por la belleza de su entorno natural, como el Paraje de la Hoz del Río Júcar y la Sierra del Mugrón, pero también por el pantano de Almansa, un enorme embalse que recoge las aguas pluviales de la zona.
Comer y dormir en la ruta del vino Almansa
Antes de cerrar este post no podíamos dejar de lado la gastronomía en esta ruta del vino Almansa. El maridaje de los vinos de la tierra con los productos de la zona es una de las mejores opciones para completar un fin de semana único en las localidades que la componen. Y como visitamos varios de estos pueblos, yo te recomiendo algunos de los restaurantes más punteros de esta comarca.
- Restaurante +Ideas, Higueruela: ¿Quién ha dicho que la vanguardia está reñida con la gastronomía local y rural? Si visitas este restaurante te vas a dar cuenta de que en algunas pequeñas localidades de España se trabaja en la cocina más innovadora y divertida. En +Ideas te vas a encontrar unos cuantos trampantojos elaborados con buen producto. No dejes de probar su “suelas”, sus “naranjas de la china” y, por supuesto, termina la comida a lo grande, con “café, copa y puro”… Y luego me lo cuentas.
- Mesón El Pincelín, Almansa: hay lugares que mantienen la calidad y su buen producto desde su fundación hace ya 70 años. El Pincelín es uno de los restaurantes históricos en Almansa, conocido por su buena gastronomía tradicional puedes encontrar desde ensalada con perdiz escabechada, hasta un bacalao exquisito, pasando por los guisos de cuchara y unos postres caseros increíbles. No te pierdas su magnífico suflé de melocotón, suave y ligero, ideal para terminar una comida contundente.
- Restaurante Los Arcos, Alpera: si quieres comer carne este es el lugar adecuado para degustarla a la brasa. No te pierdas su parrilla para compartir, con todo tipo de carnes o sus tablas de quesos. No te quedes sin probar las chuletas o el cordero, son un imprescindible, al igual que un buen platito de jamón cortado a mano.
Y si estás interesado en disfrutar de unos días en la zona de la Ruta del vino Almansa, te dejo el enlace a booking para que encuentres tu hotel ideal entre los que forman parte de esta ruta: Alojamientos Torre del Reloj, Casa Alfonso, Hostal el Cazador y Casas Rurales La Peña.
Me gustaría dar las gracias a la Ruta del Vino Almansa por invitarme a conocer sus vinos, su patrimonio cultural, tradicional y ecológico durante un fin de semana. No se trata de un post patrocinado si no de un resumen de una experiencia entre bodegas y gastronomía, aderezada con un buen chorrito de arte y cultura. Gracias a Rocío por acompañarnos estos días, a MDM la agencia de comunicación que nos contactó para visitar esta ruta y a mis compañeros José de Mapa y Mochila, Noelia de Dónde Come Noelia, Noelia de España Contigo y Naira de Modo Traveller.