Si tuviera que elegir entre los lugares que más me gustaron durante nuestro roadtrip veraniego en Cerdeña, seguramente, además de los nuraghes y su cultura o las playas, diría Bosa. Este pueblecito costero, de entramado medieval y fachadas coloridas, me pareció uno de los rincones más bonitos y encantadores de la isla. Hoy te contamos qué ver en Bosa un borgo pintoresco en la provincia de Oristano.
Qué ver en Bosa
La historia (en breve) de este pueblo
No hay a ciencia cierta datos sobre el origen de la localidad de Bosa, aunque su pasado, tan antiguo como mitológico, estaría según la leyenda ligado a Calmedia. Esta mujer se relaciona con el rey Sardus Pater una especie de semidios venerado por la civilización nurágica que confluye en la idea de este personaje en el siglo I a.C. La tal Calmedia se habría enamorado del valle del Temo y habría fundado la ciudad de Bosa a sus pies.
Lo que bien es cierto es que hay restos en época prehistórica en las cercanías de Bosa, además de un primer asentamiento en la época del bronce con la ya citada cultura nurágica y sus construcciones. De esta época son algunos nuraghes como el de Monte Ferru, S’Abba Druche o Santu Lò. Todas las civilizaciones que pasaron por Cerdeña tuvieron contacto con Bosa, tanto fenicios, como cartagineses, como posteriormente romanos tuvieron una importante actividad comercial en la zona. En la época romana se asentó el primer “municipio” pero será durante la época medieval cuando Basa se convierte en lugar de cierta importancia como sede episcopal y centro de la comarca.
Durante todo el periodo medieval los habitantes de Bosa se fueron asentando en las faldas de la parte más alta de la ciudad, donde se construyó la primera fortaleza. En esta época se construyeron algunos templos como la iglesia de San Pedro y el puerto de la ciudad se constituye como uno de los más importantes de la zona junto con el de Porto Torres. En el siglo XII se construye el castillo de Serravalle, una auténtica fortaleza en lo alto de Bosa. Fuero siglos complejos en los que Bosa se debatía entre unos feudos y otros, guerras y batallas. En el inicio del siglo XV Bosa cayó bajo el control de la Corona de Aragón, dándole rango de municipio catalán, algo de lo que todavía hay huellas, por ejemplo en el dialecto de la zona. Sin duda, fue una época de importante desarrollo comercial y cultural para la ciudad. Tanto es así, que el mismísimo rey Fernando el Católico la nombró ciudad en 1499, sin duda, una época próspera.
Los siglos XVI y XVII, sin embargo, las tornas se volvieron en contra y el pueblo tras una infinita decadencia quedó casi despoblado, tras numerosas vicisitudes como epidemias o incendios. La llegada del imperio Austriaco de los Habsburgo en el siglo XVIII y los Saboya en el XIX devolvieron la prosperidad a la localidad, desarrollando en las orillas del río Temo un buen número de curtidurías artesanales. Aquellas curtidurías, como veremos, siguieron su producción duranta buena parte del siglo XX, en nuestros días son una atractivo turístico y fotográfico más. En la actualidad Bosa es un pueblo precioso que deberías visitar si estás de viaje por Cerdeña.
Qué ver en Bosa: lugares imprescindibles
Sí, por supuesto que hay cosas que ver en Bosa, pero lo que te diría antes de cualquier otra visita es que disfrutes de las calles de su centro histórico. Es que Bosa es encantadora, con calles empedradas entre fachadas altas, con tres o cuatro pisos, pintadas de múltiples colores. Me recuerda bastante a algunas zonas de Liguria como Cinque Terre, Camogli o la Costa Amalfitana. Sin embargo, en este caso, con la suerte de que hay menos gente por sus calles y que podrás disfrutarlas e, incluso, fotografiarlas.
Pero vamos al lío, algunas de las cosas que no te deberías perder en esta localidad: el Castillo de Serravalle, la iglesia de San Pedro, las curtidurías de la orilla del río Temo… Por cierto, esta mini guía no tiene un orden cronológico, puedes visitarla como quieras.
El Castillo de Serravalle
En lo alto del pueblo, en el cerro llamado de Serravalle se encuentra la gran fortaleza Malaspina, es decir, el castillo de Bosa. Se empezó a construir en el siglo XII sobre una antigua fortaleza gracias al mecenazgo de la familia Malaspina dello Spino Secco. El castillo se puede visitar, además te lo recomiendo ya que las vistas desde allí son espectaculares, el ingreso cuesta 5 euros y, sin duda, es una de las atracciones que ver en Bosa.
A la construcción del siglo XII, una torre y parte de la muralla norte, se le van añadiendo algunas otras estancias como la Torre del Homenaje (Torre Maestra) en el siglo XIV. Uno de los lugares más bonitos del castillo es la capilla en el recinto amurallado. La capilla se construye entre los siglos XIV y XV con originales y bellos frescos de impronta hispana.
Este magnífico castillo, como otros muchos en Europa, cuenta con su propia leyenda fantasmagórica… Según la leyenda el Marqués de Malaspina era un hombre muy celoso, tanto es así que intentaba que su esposa no saliera del castillo ni para ir a misa. Para ello construyó un pasaje subterráneo bajo el pueblo que llevaba hasta la Catedral. Un día, sin embargo, preso de los celos ante las miradas que despertaba su esposa le cortó parte de la mano, guardando los dedos en un bolsillo. Se olvidó del hecho hasta que delante de algunos hombres de la ciudad sacó los dedos de su bolsillo horrorizando a todos los que se encontraban allí. Según la leyenda, algunas de las piedras que forman el castillo son los dedos petrificados de aquella mujer. ¿Tétrico? Pues no sé, pero Bosa es todo lo contrario…
El centro histórico de Bosa
El centro histórico y medieval de Bosa, también llamado Sa Costa, es la parte más bonita del pueblo. Como ya os he dicho disfrutad mucho del slow travel, de la comida en los restaurantes de su plaza, de las calles y callejuelas… Pero venga, aquí van algunos sitios que también tenéis que ver en Bosa entre sus pintorescas fachadas de colores y sus callecitas empinadas.
Hay varios templos entre los que destaca la Catedral de la Inmaculada Concepción con su escueta fachada y su suntuoso interior. Es una catedral del siglo XIX ya que hay otro templo concatedral, San Pedro Extramuros en las afueras del pueblo que fue durante siglos el más importante de Bosa. Es una bonita iglesia fuera del pueblo en las orillas del río Temo, construida en época románica y un bello ejemplo de románico sardo.
Hay algunas otras iglesias como la del Rosario en la que destaca su bonito reloj o la del Carmen, además de algunos palacios y casas significativas en la calle Vittorio Emanuele. Allí se puede visitar la Pinacoteca Museo Deriú, que a nosotros no nos dio tiempo. Muy cerca de este edificio está la Piazza Costituzione que junto la adyacente Vía Santa Croce es muy agradable para cenar o dar un paseo.
También es muy agradable la zona del Ponte Vecchio y justo el final de la mencionada Vía Santa Croce, con alguna vinoteca muy interesante y decoración que recuerda a los pescadores de la localidad. Cuando llegues al río sólo tendrás que cruzar este antiguo puente para visitar la zona de las antiguas curtidurías.
Las antiguas curtidurías de Bosa
Sin lugar a dudas, una de las cosas que ver en Bosa son sus antiguas curtidurías en las orillas del río Temo. Se trata de una serie de edificios, en torno a 30, que tiene como origen el siglo XVII y que albergaban a los curtidores. Este oficio es mucho más antiguo en Bosa, ya que según cuentan las crónicas habría huellas incluso de que ya existían durante la época romana.
En la actualidad ostentan el título de Monumento Histórico Nacional desde el año 1989. Son el símbolo de la época de renacimiento de la ciudad tras un par de siglos casi abandonada con la llegada del comercio en la época de los Saboya. Así, Bosa se convirtió en la principal exportadora de este tipo de producción tanto para Italia como para otros países del mundo. Cuando las visites también podrás conocer el Museo delle Conce (de las curtidurías), una inmersión en cómo se trabajaba el cuero y los textiles en la zona.
El paseo por la zona de las curtidurías y el río Temo es muy agradable. Por cierto, hablando del río, también tiene paseos fluviales, aunque nosotros no llegamos tampoco, porque justo cuando terminamos el tour por el pueblo ya había salido el último barco.
Qué ver cerca de Bosa
Cerca de Bosa se encuentra Bosa Marina, es decir, la costa y las playas de este pueblo. Hay un lugar muy destacado en las guías, también masificado en verano, tanto es así, que prefiero no poner la foto por la cantidad de gente que había no vaya a tener que pagar derechos. Si vas fuera de temporada, te aconsejo que vayas a ver la piscina natural de Cane Malu. Es espectacular con sus aguas transparentes entre una enorme roca, pero en verano es imposible.
Hay algunas otras calas y playas interesantes como la Cala ‘e Moro y la Playa de Bosa Marina que es la más grande de los alrededores.
Datos prácticos
Llegar a Bosa no es sencillísimo, sobre todo si no te gusta conducir. Hay que tener en cuenta que Cerdeña es grande y que las carreteras no son precisamente las mejores de Italia. Eso sí, si vas o vienes desde Alghero vas a alucinar con la carretera por la costa… no mires demasiado si conduces, pero es preciosa. Nosotros llegamos desde el interior (Bono, Ozieri) y nos fuimos hacia Alghero, muchas curvas en cualquier caso.
Dónde comer en Bosa (y dónde no comer)
Estuvimos un par de días por la zona de Bosa y os recomiendo un par de sitios, mientras que os desaconsejo otro, en el que cenamos y sinceramente no merecía la pena. También te aconsejo que si vas en verano en fin de semana reserves, porque si no te tocará, como a nosotros, cenar en un sitio regulero: intenta no ir al restaurante Old Bride, está en la zona de las curtidurías, justo al pasar el Ponte Vecchio.
En cambio algunos buenos sitios para comer:
- Bacco Bistrot (Corso Vittorio Emanuele II, 44), no tiene pérdida está en la calle más bonita de Bosa. Se comer super bien, si os gustan los quesos y los embutidos tiene unas tablas estupendas. Hay un montón de bocadillos y tostas, enormes, no os paséis que no os lo termináis.
- Ristorante Essenza al Borgo Sant’Ignacio (Via Sant’Ignacio 33), en pleno centro medieval. Es un restaurante con pastas y pescados muy de la zona y de una calidad excelente. La terraza es preciosa, si puedes cenar allí es un lugar ideal y romántico.
Dónde dormir en Bosa
Además de qué ver en Bosa, también te contamos dónde puedes dormir si quieres pasar allí alguna noche. Si te gustan los pueblos bonitos es uno de los mejores lugares que vas en encontrar en Cerdeña de noche y de día, o sea que aprovecha y quédate aquí a dormir.
Nosotros nos alojamos en pleno centro de la ciudad, justo en el inicio del barrio antiguo y medieval en un hotelito rural precioso. Se trata de La Vecchia Torre un edificio con la estructura típica y antigua de las casas de Bosa, muy alto y estrecho. No tiene muchas habitaciones pero son cómodas, super limpias y puedes dejar tu coche cerca y no volver a tocarlo. No nos ofrecieron desayuno pero abajo hay una sala en la que te puedes hacer café, puedes tomar un vino de producción local o algún producto similar. Son super amables.
Os dejo el enlace a La Vecchia Torre en Booking por si os interesa este alojamiento.