Cerca de Edimburgo hay algunas visitas muy recomendables que se pueden hacer tanto si estás realizando un roadtrip por Escocia como en una escapada de cuatro o cinco días. Visitar Stirling y su castillo es una muy buena opción para completar unos días teniendo como centro “logístico” Edimburgo. ¿Por qué Stirling? Porque como verás en este post es una bonita localidad llena de historia, patrimonio y atractivos turísticos. ¿Te animas a conocerlo con nosotros?
Visitar Stirling en un día
Un poco de historia de Stirling
La ciudad de Stirling se encuentra a unos 60 kilómetros de Edimburgo, prácticamente en el centro de Escocia, dando paso a las famosas High Lands (las Tierras Altas). En la zona hay restos de presencia humana en la Edad de Bronce, hace unos cuatro mil años. Durante la época romana fue un lugar con cierta importancia por su situación estratégica en lo alto de una colina desde donde era fácil el control del territorio.

La recuperación de la zona por los reyes escoceses dio lugar a la creación de la primera villa o burgo medieval en el siglo XII. En los siglos siguientes, Stirling tuvo importancia comercial y estratégica, fue un centro económico importante como generador de riqueza a través de sus mercados, con gran contacto con la zona de Alemania y los Países Bajos. En el siglo XIII se produjo una de las batallas más importantes de la Guerra de Independencia Escocesa, la batalla del Puente de Stirling.

La ciudad siempre ha sido objeto y objetivo de batallas y contiendas, muy famosa es la llamada Batalla de Stirling durante la Guerra de los tres Reinos (siglo XVII) o ya en el siglo XVIII los intentos de toma de su castillo por parte de los ingleses. El comercio siguió siendo una de las principales fuentes económicas de Stirling durante la época victoriana y el siglo XIX. Incluso, en los periodos de las Grandes Guerras del siglo XX tuvo un papel fundamental la relación comercial de su puerto. En la actualidad cuenta con unos 50.000 habitantes y su economía sigue centrada en el comercio y comunicaciones.
Civitatis llena tus viajes de experiencias (además nos ayudas a seguir con el blog)
Viajes donde viajes, hazlo seguro con Intermundial
Visitar el Castillo de Stirling
Entre los principales lugares y atractivos turísticos por los que visitar Stirling está su famoso castillo. Está situado en lo alto de la ciudad, sobre una gran roca desde donde se controlan los valles cercanos. Tiene una protección natural ya que se aprovecha la altura de la roca donde se asienta. Sin duda, la visita es muy agradable, se puede hacer de forma libre o con audio guías, aunque en la propia visita también te encontrarás con algunos personajes históricos que te contarán las vicisitudes e historia de este edificio y de aquellos que lo habitaron.

El complejo, en su mayor parte, data de los siglos XV y XVI, aunque hay alguna estancia y estructura anterior. Algunos estudiosos indican que hubo una construcción anterior a la fortificación, incluso se habla de ella desde el siglo IX, pero los primeros registros tienen origen en el siglo XII. Durante estos siglos, como hemos comentado, siempre fue objeto de deseo y lugar de batallas entre ingleses y escoceses, pasando de unas manos a otras. Las estancias más importantes que se conservan actualmente se realizan entre el final del siglo XV y durante todo el XVI bajo los reinados de varios Estuardo, James IV, James V y James VI.
Todos estos monarcas quisieron dar a Stirling el aire y el ambiente de un palacio renacentista, residencia real y centro de poder de la época. El castillo se convirtió en esta época en un lugar principal donde se desarrollaron acontecimientos tan importantes como la coronación de la reina María de los Escoceses (que te puedes encontrar por el castillo). La visita es muy interesante ya que algunas zonas reproducen cómo era la vida cotidiana del castillo, replicando algunas estancias como dormitorio y las cocinas de palacio.

La Capilla Real es una de las estancias más significativas del castillo. Se construyó en el final del siglo XVI aunque destaca su decoración pictórica mural ya del inicio del siglo XVII. Una de las curiosidades de esta iglesia es que fue uno de los primeros templos protestantes de Escocia y la última parte construida del castillo. Por cierto, una de las partes que más me gustó en esta visita fue la de las cocinas, con representaciones de la vida cotidiana.
Horarios de apertura del castillo
Horario de verano, se considera del 1 de abril al 30 de septiembre: de 9:30 a 18:00, aunque el último acceso se hace a las 17:00. Desde el 1 de octubre al 31 de marzo el horario va de 9:30 a 17:00, sería el horario de invierno y la última hora de acceso es las 16:00, pero no te pierdas nada por ir a última hora.
El día 1 de enero, aunque es festivo, el castillo abre más tarde a las 11 de la mañana.

Otros lugares interesantes en Stirling
Como ciudad histórica visitar Stirling ofrece al visitante algunos lugares imprescindibles más allá de su castillo. Entre ellos, destacan sin duda su centro histórico, la Old Town, la zona más antigua de origen medieval que nace alrededor del castillo y bajo su protección. Pasear por el centro histórico de Stirling es una delicia, fundamentalmente por lo bonito de sus estructuras en piedra, algunas todavía medievales y sus calles empedradas.
No te pierdas la plaza del antiguo mercado, como hemos dicho esta ciudad tiene un importante pasado comercial, representado en Mercat Cross. Allí encontrarás uno de los símbolos de Escocia, el unicornio, en forma de monumento en el centro de la plaza.

Otro de los lugares imprescindibles es la Antigua Cárcel de la ciudad (Old Town Jail of Stirling), aunque no es visitable durante algunos periodos del año. En la Antigua Cárcel además del edificio tendrás una experiencia única en la exposición de escenas de crímenes. El edificio del siglo XIX te transporta a la vida en prisión y de acuartelamiento militar cuya función era la de detención de prisioneros.
Uno de los edificios más significativos y que te encontrarás en tu subida al castillo es Argyll’s Lodging. Se trata de un edificio del siglo XVII con una gran impronta renacentista, que me recuerda mucho a las construcciones de la zona del Loira. Su función, básicamente, era albergar a nobles y cortesanos durante las estancias de la familia real en el castillo.

Mar’s Wark fue la casa familiar de John Erskine, conde de Mar y figura principal como guardián del castillo de Stirling. La casa sirvió de aposento real en el siglo XVI, aunque lo único que haya llegado a nuestros días es su imponente fachada. El estado ruinoso de esta antigua y bella casa impide que se pueda visitar, pero puedes verla desde fuera.

Por supuesto, no te puedes perder en Stirling la iglesia de la ciudad Holy Rude. Es anterior al castillo, o mejor dicho, pertenece a la época en la que originalmente se construyó el castillo, siglo XII. Aunque al igual que este, por algunas vicisitudes tuvo que ser reconstruida en el siglo XVI. Esta iglesia vivió algunos importantes acontecimientos como coronaciones reales, el del hijo de María Estuardo, el rey Jacobo VI de Escocia, cuando era todavía un bebé. Al lado de la iglesia está el impresionante cementerio que mucha gente (también yo, arriba) fotografía, es muy curioso e, incluso, puedes pasear por él.
Cerca de Stirling, en sus alrededores, se encuentra el Monumento Nacional a William Wallace. Se trata de una gran torre del siglo XIX situada sobre lo alto del monte Abbey Craig. Este monumento conmemorativo hace referencia a uno de los héroes nacionales de Escocia que todos conoceréis por la película Braveheart, protagonizada por Mel Gibson. Aunque no hay muchas fuentes escritas sobre el mismo, es uno de los personajes más importantes del nacionalismo escocés. Vivió en el siglo XIII y encabezó una de las revueltas más importantes del país contra la dominación inglesa.

Cómo llegar a Stirling
Stirling está más o menos a una hora de Edimburgo. Nosotros fuimos en tren con la compañía escocesa Scotrail. En este trayecto hay numerosas frecuencias y la distancia se recorre en menos de una hora. En el trayecto también podéis visitar Linlithgow, que es un precioso castillo a medio camino entre las dos ciudades.
También hay autobuses de línea que conectan Edimburgo con Stirling, sería la línea 909 de la compañía Scottish Citylink. En esa misma Sin duda, esta excursión es ideal para un día y si no tienes coche no te tienes que preocupar por ello. En automóvil propio también se puede recorrer la distancia en torno a 50 minutos o una hora.