Un blog de Palo La pasión por la gastronomía en Sicilia es parte de la tradición, de la historia y de la cultura de la isla. Aquellos que conozcan la isla, o personajes tan representativos como al Comisario Montalbano, sabrán la importancia emocional y la relación que hay entre la vida y la gastronomía Siciliana. La vida familiar y social, se distribuye en torno a una mesa repleta de viandas propias de un gran banquete sin espacio para la falta de hambre. Sicilia, la joya del Mediterráneo, es tierra de buen comer, de platos generosos e ingredientes sabrosos. Hoy te contamos en un recorrido gastronómico qué comer en Sicilia, sus platos típicos y algunos tips para encontrar restaurante en sus ciudades y pueblos si estáis de road trip por la isla.
Comer en Sicilia: platos típicos
La gastronomía siciliana es, en realidad y desde su origen, un compendio de diversas culturas que a lo largo de las centurias fueron ocupando los diferentes territorios de la isla. Aromas árabes y mediterráneos, sabores a frutos secos, acompañados de verduras y carnes del interior, y, por supuesto, pescados y mariscos, ocupan los menús de sus restaurantes y las mesas de los sicilianos.
Las especialidades de la cocina siciliana tienen una importante raigambre histórica, surgida de la dominación de los pueblos que pasaron por la isla: normandos, árabes, españoles… Este factor histórico junto con un factor propiamente geográfico y territorial ha creado una gastronomía rica y variada con sabores diversos y heterogénos.
Entrantes sicilianos
Arancino / Arancina
El Arancino / Aranciana, este “entrante” por excelencia siciliano que llamaremos arancino si estamos en la zona este de la isla (Catania) y que sin embargo se convierte en femenino en la zona noroeste (Palermo) es una auténtica exquisitez. El origen de los “arancini” está en la comida árabe, cuenta la historia que fue el resultado de la invención de un cocinero árabe que quería que el sultán pudiera comer arroz cuando iba de caza. Esta gran bola de arroz, rellena con ragú de carne o con diversos ingredientes que ha ido entrando a formar parte de la receta (jamón y queso, por ejemplo), se pasa por pan rallado y se fríe para lograr su forma. En algunas ocasiones, en lugar de frito, se puede encontar cocido o al horno, pero lo más habitual es frito. Son tan famosos estos entrantes de arroz, que el propio Camilleri dio nombre a uno de sus libros con ellos “Gli arancini di Montalbano”, un conjunto de relatos breves que, en algunos casos, han sido el inicio de algunos de los guiones de la serie de televisión.
La caponata
Panelle
Seguramente son las menos conocidas de este post, las “panelle” son un plato típico de la cocina siciliana pero, sobre todo, de la palermitana. Se trata de una masa hecha con harina de garbanzos, que se deja enfriar y endurecer, se corta a rectángulos y se fríe. Son muy fáciles de hacer en este sentido y muy sabrosas, es cierto que son un poco pesadas al ser fritas pero si quieres comer en Sicilia y probar toda su gastronomía original tendrás que pedirlas en cualquier bar. Es muy habitual que se pongan en bocadillo o con croquetas de patata.
Los primeros platos
Pasta a la norma o pasta con sardinas
Hay varias plastas que no podrás evitar si visitas Sicilia. La Pasta alla Norma no puede faltar a la hora de comer en Sicilia. Es típica sobre todo de la zona de Catania, donde se cuenta que está su origen, pero se puede encontrar en toda la región. Es un plato sencillo pero muy sabroso, con la pasta típica de cada zona (siempre corta, no valen los spaghetti): busiata, ziti, maccaruni… acompañada de berenjena frita, ricotta salada, tomate y albahaca.
La pasta con sardinas (pasta con le sarde) la puedes comer en Sicilia en todas las provincias y zonas aunque su origen es palermitano. En este caso, la pasta tiene que ser larga, se acompaña de sardinas, hinojo, pasas, piñones, pimienta, sal, cebolla, azafrán y aceite. Seguramente, al igual que la mayoría de estos platos, hay variantes diferentes, pero esta es la más habitual.
Pasta con pistachos
Hay viariantes de recetas de pasta con pistachos. En el último viaje a sicilia tome diferentes tipos, con bacon o con calabacines, son lo más habitual. Las salsas de pistachos pueden ser más o menos dulces o saladas, elaboradas con natas para dar consistencia o con pesto de pistacho. Es muy habitual el consumo de pistacho en la cocina siciliana, si hay un lugar conocido donde se cultivan es Bronte, en la provincia de Catania. Desde allí salen una buena parte de los pistachos con los que se condimentan las pastas, pero también los dulces, cremas e incluso mortadelas en la isla.
El cuscus (cous cous)
La inspiración norte africana llega a Sicilia a través de sus platos de cuscús, sobre todo típicos en la zona de la costa de Trápani. En esta provincia, en sus pueblos costeros y en la capital, es muy habitual encontrar recetas de cuscús que tienen su origen en la dominación árabe. Normalmente, el cuscús siciliano se diferencia de otros porque se realiza con pescados y mariscos, aprovechando el caldo de estos y añadiéndolos al plato. La verdad, es un plato muy representativo y nos pareció realmente rico, en las diferentes variedades que probamos, con pescado frito y con salsa de pescado y marisco.
Arroz con marisco y pescado (risotto alla marinara)
El risotto también es habitual a la hora de comer en Sicilia. Es, quizá, menos típico que en otras regiones como Piemonte, pero también puedes encontrar buenos arroces en la isla. Nosotras disfrutamos de un arroz con pescado espectacular en un balcón al mar en el pueblo palermitano de Cefalú. El arroz, como bien sabemos los españoles, combina perfectamente con mariscos y pescados, por lo que es un plato muy redondo en las mesas sicilianas. En la mayoría de los restaurantes de costa lo encontrarás como “Risotto alla marinara”, un arroz marino con un gusto intensísimo que suele llevar: mejillones, sepia, almejas y un caldo de pescado riquísimo.
También es común encontrar pasta con pescados y mariscos, similar a este arroz, con mejillones, con almejas o con “nero di seppia”, es decir, pasta negra muy similar a lo que conocemos como el arroz negro. No os olvidéis del Pesto Trapanese, en la zona de Trápani o del pesto rojo en toda la isla.
Segundos platos en Sicilia
Sardinas (Sarde) a beccafico
Aún viviendo en Italia no había escuchado hablar de ellas hasta que no tuve una suegra siciliana. Estas sardinas son típicas y las puedes comer en Sicilia en cualquier ciudad aunque son originalmente catanesas. “Beccaficu” como yo las conozco es una masa de pan, queso, uvas, perejil, pimienta, aceite y sal que se pone entre la sardina. Todo esto se frie y se engancha con un palillo para que no se pierda la mezcla. Es un plato muy típico que se come en muchos restaurantes, pero que hecho en casa es una auténtica delicia.
Pescado frito y pez espada
La isla cuenta con infinidad de tipos de pescado, por lo que los segundos de pescado son platos que siempre encontraras en la mesa siciliana. Se come muchísimo pez espada y es fácil encontrarlo cocinado de diversos modos. Los calamares también son muy típicos y es fácil encontrarlos en “brodo” (cocinado), con tomatitos o rellenos. El pescado además de cocinado es normal encontrarlo frito, en las últimas vacaciones en Sicila yo lo tome alguna noche. Normalmente en un fritto mixto o en un plato de pescado se suele incluir algún tipo de pescado, calamares y gambas (no muy grandes) fritas.
Es muy típica la gamba roja de Mazara del Vallo, aunque no es precisamente barata, es una marisco muy rico. Por supuesto, como ya os hemos contado en los primeros platos comer en Sicilia sería imposible sin probar una pasta con pescado o marisco.
Postres en Sicilia
Il “Cannolo”
Es el postre por excelencia en Sicilia y es una verdadera locura. Se trata de una especie de tubo de masa frita rellena de queso ricotta fresco y dulcificado. El cannolo originalmente era un dulce típico para las fechas de carnaval, pero su fama y lo rico que está han hecho de este un símbolo siciliano.
Además del queso ricotta se suele decorar con pistacho molido o chocolate y algunas frutas escarchadas, que son muy típicas en Sicilia también. Hay diferentes tamaños de cannolo, porque realmente es un postre que llena bastante y en algunos bares, restaurantes y pastelerías lo podéis encontrar en tamaño mini.
La “Cassata”
Vaya por delante que nunca, nunca, nunca la he probado, por lo que no puedo hablar de ella… Es famosísima en sicilia y está hecha con ricotta, el mismo queso del cannolo, bizcocho, almendras y furta escarchada. Sinceramente, mezcla varias cosas que a mí no me gustan y por eso nunca la pruebo. (Prometo que intentaré hacerlo en Napoles próximamente). Lo podéis encontrar tipo tarta o en pequeñas porciones individuales “cassatina”. Y si la probáis, ¡nos contáis!
Granita y la brioche (Brioscia ca granita)
El granizado siciliano de limón es un deber si vas a la isla. Además de estar riquísima es un oasis en el desierto veraniego siciliana, porque sí, hace mucho calor y un granizado de limon (“granita al limone”) viene muy requete bien. Pero no solo la hay de limón, la hay de multitud de sabores, son muy habituales la de café, pistacho, fresa o almendra.
Lo más tipico con la granita es comer una especie de brioche o bollo. Esta es la versión menos light, pero todavía podés encontrar otra más alucinante que es ese bizcocho o bollo, con nata y con helado… una fantasía de calorías que está muy bueno. Y sí, por supuesto, comer en Sicilia no puede estar completo sin un helado. Son igual de buenos que en cualquier otra zona de Italia, además, son muy baratos.
Vinos típicamente sicilianos
En Sicilia también se produce vino, no podía faltar en un territorio tan rico en tradiciones el cultivo de la vid como parte esencial de su cultura. Hay algunos vinos muy conocidos como el de Marsala, que es un vino dulce, similar al moscatel, que se usa para acompañar a los postres y se produce en la provincia de Trapani en las bodegas de la localidad de Marsala.
Pero además de esta denominación de origen hay un buen número de DOCs en Sicilia, por ejemplo los vinos del Valle de Noto (Noto DOC), en la provincia de Catania la denominación Etna, en Siracusa el Moscato (blanco y dulce), en Palermo Contea di Sclafani o Contesa Entellina. En Agrigento el famosisimo Sciacca DOC, Sambuca di Sicilia o Santa Margherita di Belice… Podría seguir así nombrando denominaciones de origen que no he llegado a contar pero sumaran unas 20 o 25 en toda la isla.
También en las pequeñas islas sicilianas de Pantelleria o Lipari hay algunos vinos dulces muy típicos, como el Moscato, Passito di Pantelleria o el Zibibbo. Si vais a Palermo los podéis encontrar en muchísimos bares para acompañar a un cannolo.
Sinceramente, si os gusta el vino, Sicilia es una buena región. A mí, personalmente, me gusta mucho la bodega Donnafugata, que está en las colinas del Etna y tiene unos tintos muy agradables con frutos rojos, muy bueno para las carnes. Y por supuesto los Syrah y Nero D’Avola de la zona, también suelen ser una gran opción.
Otras cosas de la gastronomía siciliana
Comer en Sicilia incluye otras cosas a tener en cuenta como los desayunos sicilianos o las sobremesas. La pastelería siciliana es muy importante, encontraréis multitud de galletas y postres hechos con frutos secos como la almendra y el pistacho. Estos dulces puden tomarse tanto en la sobremesa, en el desayuno o en la merienda, acompañados de vinos dulces y, por supuesto, de café. El desayuno más habitual en Sicilia es un “cornetto”, es decir, un croissant, vacío (vuoto) o relleno de crema de cacao y avellana (nutella) o crema de pistacho. Hay muchísimos bollos rellenos de cremas para desayunar, conchas, napolitanas, etc. Por supuesto, acompañados de café que normalmente es con leche o capuccino.
Las sobremesas sicilianas también son intensas. Normalmente se toma algún tipo de “digestivo” es decir, licor para hacer mejor la digestión. Los más habituales son el limoncello y los “amaro”. El limoncello es típico en la isla y hay algunas zonas que elaboran este licor, pero no es el único también hay limones de naranja muy similares al limoncello. El amaro también es normal en las mesas sicilianas, es un licor característico en toda Italia con un sabor fuerte y amargo que a mí no me gustaba nada en los primeros años en Italia y, al que, poco a poco, con el pasar del tiempo me acostumbre. También podéis encontrar difrentes aguardientes, la grappa, que se elabora en numerosas bodegas vinícolas.
Como en toda Italia, en los restaurantes sicilianos hay un impuesto o algo que no solemos tener en España, es el “coperto”. Se trata de algo así como el servicio que varía de entre 1,50€ a 3€ normalmente en la mayoría de establecimientos y que veréis en vuestra cuenta.
