Si te preguntan ¿cuáles son tus ciudades preferidas? ¿Qué responderías? En este post, con un tono más personal, te cuento las ciudades que hasta ahora he visto y más me han gustado, las que me han emocionado y en aquellas en las que no he tenido sensaciones. Hoy te cuento mi top 10 de ciudades del mundo y mis ciudades preferidas de España. ¿Qué te parecen?
Ciudades, ciudades, ciudades, conjuntos de gente civilizada o por civilizar agrupada en una extensión de terreno con mayor o menor extensión.
Ciudad: Conjunto de edificios y calles, regidos por un ayuntamiento, cuya población densa y numerosa se dedica por lo común a actividades no agrícolas.
Mi top 3 de ciudades españolas… o 4
Una de mis ciudades preferidas en España es Cáceres, estuve por primera vez con una excursión del instituto y tenía muy pocos recuerdos de ella. Volví hace cuatro o cinco años y descubrí una ciudad en la que los edificios medievales y renacentistas te transportan a una época que me hubiera encantado conocer. A mí Cáceres me lleva al siglo XVI, como también lo hace Salamanca, quizá por eso me gusta tanto la vecina provincia. Cáceres tiene un aspecto mucho más medieval y una fuerte impronta árabe que le confieren un aspecto irresistible para mí. Aljibes, palacios del siglo XVI y torreones con almenas ¿qué más se puede pedir? Cáceres tiene para ver y disfrutar mucho más que un día.
Oviedo es otra de las ciudades que me encantan. Me gusta por lo bonita y lo bien cuidada que está, por sus alrededores con esos edificios prerrománicos como Santa María del Naranco o San Miguel de Lillo, o la casi absorbida San Julián de los Prados. Me gusta porque es escenario de la Regenta y la sigo imaginando como escenario perfecto de novela decimonónica y recuerdo los primeros párrafos de Clarín:
Vetusta, la muy noble y leal ciudad, corte en lejano siglo, hacía la digestión del cocido y de la olla podrida, y descansaba oyendo entre sueños el monótono y familiar zumbido de la campana de coro, que retumbaba allá en lo alto de la esbelta torre en la Santa Basílica.
Claro que con Oviedo me pasa otra cosa, recuerdos de infancia, amigos de toda la vida, amigas adquiridas en la universidad y noches que no terminaban o terminaban bien. Supongo que, por eso, Oviedo es una de las ciudades que recomiendo visitar.
Toledo, ¿Cómo no va a estar Toledo en esta lista si es una de las ciudades que más me gusta del mundo y que más visito? Siempre suelo ir a final de la primavera un fin de semana a pasear por allí tranquilamente. Me encanta su centro histórico, sus monumentos y sus vistas, ya que tiene unas panorámicas únicas.
Salamanca, mi ciudad, mi casa. No tengo palabras suficientes para explicar lo bella que es Salamanca, la ciudad más bonita de España, con la plaza Mayor más famosa, la Universidad más antigua, las dos catedrales y las calles más frías. Salamanca es bella porque los siglos trajeron a ella grandes constructores, escultores y mecenas que la convirtieron en monumental e histórica. Salamanca es conocida para el viajero, pero también tiene tesoros escondidos entre sus piedras, incluso habiendo perdido casi el 50% de su patrimonio durante el periodo de la Guerra de la Independencia. Qué puedo decir de su gastronomía, sus bares de pinchos alrededor de la plaza o los estudiantes que pueblan las noches salmantinas. Salamanca, la más bonita de todas
Mi top 10 de ciudades mundiales
10. En este meritorio puesto está Berlín y Ámsterdam, dos buenos viajes con muchas diferencias entre ellos. Una era deseada y esperada y no decepcionó, la otra con muchas menos expectativas se convirtió en uno de los viajes más agradables de los últimos años… No sabría decidir.
9. Chicago: acaba de posicionarse en este lugar tan merecido. No soy una enamorada ni de Estados Unidos ni de sus ciudades, pero Chicago es increíble. Es la cuna de la arquitectura moderna, sus rascacielos y el estilo decimonónico de estos me conquistaron. La vistas al río Chicago rodeado por edificios son realmente únicas.
8. Verona: será cuestión de recuerdos, de lugares que quedan en tu memoria no solo por lo bonitos que son sino por todo lo que has vivido. Verona además de bella fue mi casa durante el año del Erasmus y no puedo no mencionarla. El recuerdo de sus monumentos, la piazza delle Erbe, la piazza Bra y el Arena… son casi tan bellos como los de la Vecchia Veronetta, los chicos del ASL y mis butei.
7. La Valeta: como veis este ha sido un año de sentimientos, muchas ciudades nuevas que han desbancado a otras que ya conocía. La Valeta y sus casualidades entre balcones y santos llenaron mi corazón de buen rollo mientras su gastronomía llenaba mi estómago y mis michelines de felicidad. No dudaría en escaparme a ella en cualquier momento.
6. Edimburgo: que ganas tenía de conocerte y finalmente este año fue mi ocasión. Un viaje perfecto, con la mejor compañía posible, las risas aseguradas hasta rozar las lágrimas, los suspiros por los highlanders entre la piedra gris y fría. Conocimos una ciudad extrañamente luminosa y soleada, unas gentes amables y un lugar al que volver de vez en cuando a disfrutar de una cerveza o de un castillo. Escocia estoy deseando volverte a ver.
5. Budapest: tengo unos bellísimos recuerdos de Budapest, cada vez que recuerdo la estancia en esta ciudad una sonrisa se pinta en mi cara. Es bella, es señorial, es decadente… Budapest es inesperada, incluso, llegué mucho después que a Praga y sin embargo la hermanita fea se convirtió en un precioso cisne. Sin duda, una escapada perfecta que tengo que repetir.
4. Matera: ¿cómo así? Una ciudad bastante desconocida, al menos hasta este año, pero a la que llevaba desde 2004 con ganas de conocer. El encuentro fue absolutamente mágico, me enamoré de ella. De sus calles en los Sassi, de las piedras y su historia, de sus colores al caer la noche. No tuve tiempo suficiente para amarla en dos días, pero sí para enamorarme hasta las trancas de esta pequeña joya italiana.
Top 3 de ciudades que me encantan
Y a partir de aquí…. Pues ya no sé ni cómo puntuar a estas ciudades que me gustan tanto. Durante años he tenido claro que la primera, la ciudad de mis ojos, era París. Pero ahora mismo si soy sincera Roma y París están prácticamente a la misma altura.
3?. Roma: es eterna, es la ciudad en la que disfrutar del amor, de un color azul del cielo que inspira a creadores y artistas. La capital de Italia lo tiene todo para mí, una arquitectura riquísima que abarca numerosos estilos, pinacotecas y museos, calles y callejuelas encantadas y una gastronomía increíble. He vuelto ya que tenía algunas cuentas que saldar con Roma, supongo que conmigo misma. Saldadas las cuentas, revisados los amores hacia ella y los sentimientos que me produce, he vuelto reconciliada y reenamorada de esta maravillosa ciudad.
2?. Bangkok: es la fascinación hecha ciudad. Antes de conocerla tuve muchas reticencias, el hecho de ser una ciudad donde la prostitución campa a sus anchas me echaba bastante para atrás. Sin embargo, sus contrastes, sus sonrisas, la comida callejera, el chute de otra cultura y la inmersión por primera vez en Asia me conquistaron. Muchos viajeros opinan que está muy turistificada y masificada, pero creo que es una ciudad increíble y una de las mejores puertas de entrada al sudeste asiático. Años después, sigo con las mismas ganas de volver a ella, pasar unos días y disfrutar de nuevo de ese caos increíble.
1?. París: es la ciudad de la luz, la primera en la que sentí la emoción del viajero, así lo llamo yo. En mi primera visita a París tuve un encuentro único, no sé si conmigo misma o con ella, experiencia total de conectar con un entorno y de saber que ese es el lugar donde tenías que estar en ese momento. Es una ciudad inmensa, llena de cultura, de sabores, de lugares de película a los que volver. Desde que escribí el post he vuelto en dos ocasiones a París, una fue un poco caótica y la otra muy rápida. Sin embargo, me sigue encantado…
Las ciudades que estaba deseando visitar cuando escribí el post o que sigo queriendo visitar
Tengo muchos deseos viajeros, pero hay varias ciudades que llevan mucho tiempo rondando en mi cabeza. La primera de ellas es Estambul, sé que me voy a enamorar de este cruce de caminos, no tengo dudas de que me entrará en vena como una droga y sólo querré volver. A Estambul tenía pensado ir en 2020 para celebrar mi 40 cumpleaños, ahora ya en 2022 aquí sigo, sin conocerla. Pero espero, crucemos todos los dedos y rezad fuerte por mí, que el momento llegue en agosto de este año. De nuevo, Estambul tiene su vuelo y sus días asignados… ya veremos ¿no?
Palermo es una ciudad que tenía muchísimas ganas de visitar, adoro Sicilia, me vuelve loca su comida, no tengo más que buenas palabras para sus gentes, es un lugar muy especial para mí en lo personal y estaba deseando conocer la capital. La conocí justo unos meses después de escribir este post y me encanta. Me encantó su decadencia, en un primer momento pensé… ¿Por qué han bombardeado Milán? Sus calle me recordaban la capital lombarda y… sin embargo, tres días allí sirvieron para enamorarme.
Carcasona era un deseo desde que pasé a su lado en una mudanza y finalmente conocí poco después de escribir este post. Una de las ciudades medievales más bonitas del mundo… que en realidad es un poquito fake. La disfruté, pero… sin más.
Sigo diciendo que me encantaría conocer San Petersburgo, creo que es una ciudad tan cultural que me absorberá totalmente, aunque por el momento… no va a ser posible (palabras de 2018). Imaginad como es la situación ahora. Creo que me podría extender muchísimo en este párrafo, tomen nota: Munich, Dubrovnik, Basilea, Riga, Fez, Lisboa, Antigua de Guatemala, Hanoi todas ellas están en mi punto de mira. De todas ellas he conocido Munich, que bueno, es mona. Lisboa que me ha encantado y Basilea que está muy bien.
Ciudades que no tengo claro…
Nueva York, sigue siendo una ciudad que no me emociona especialmente, es un lugar espectacular con tanto que ver y que hacer. Pero también me gusta mucho… es que no sé que raro es lo que me produce Nueva York. Por un lado, gente, movimiento, rascacielos, parques… que no me llegan a llenar, pero sin embargo, de otro lado, luces, vistas increibles, atardeceres… que me encantan y me llaman mucho la atención. Hace poco me preguntaban el por qué de esta escasa empatía con la Gran Manzana, no tengo respuesta, simplemente nunca, en las ocasiones en las que he estado, me ha llenado el corazón, pero… me gusta mucho.
Tel Aviv fue una decepción, probablemente porque se trata de una ciudad bastante moderna, que bajo la lluvia de cinco días seguidos parecía tener poca gracia y poca alma. Muchos hablan bien de su animación nocturna, de sus playas… Pero es verdad que con el mal tiempo que nos hizo no pudimos disfrutarla ni encontrarle el punto.
Kuala Lumpur, es un gran ciudad llena de tráfico y grandes edificios modernos, hasta aquí podríamos decir que se parece a Bangkok, pero no… Ella, en mi opinión, ha perdido el sabor de la tradición, en ella no sentí emoción, no conectamos, a veces pasa. Además, tres horas de atasco para ir del centro al aeropuerto no ayudaron nada, nada a que me gustase esta ciudad. Además, la situación personal determna muchas veces los viajes, no nos olvidemos.
Guadalajara, no le cogí el punto a esta ciudad, tengo que decir que su provincia me gusta, pero la ciudad como dice el título del apartado, ni fu ni fa. Tendré que volver a ver si le encuentro ese poquito más.