Hay hoteles con encanto, hoteles encantadores y propietarios que enamoran. Así es el hotel La Corte dell’Astore, un resort absolutamente adorable en uno de los pueblos con más carisma de Italia: Alberobello. Con una ubicación ideal, una trato exquisito y unas instalaciones preciosas La Corte dell’Astore es uno de los hoteles que mejor recuerdo ha dejado en esta viajera. Hoy te cuento mi estancia en esta antigua masería llena de detalles inspirados en el arte de la cetrería a la que llegué desde Matera en mi roadtrip por Puglia y Basilicata.
La Corte dell’Astore: el edificio
El resort La corte dell’Astore se sitúa en una antigua masería con trulli. Una y otros son típicas construcciones de la zona en las cuales vivían agricultores, campesinos y dueños de haciendas ganaderas. La bella masería del siglo XIX estaba compuesta por varias estancias, algunas más de carácter señorial y otras, ocho trulli, más simples. La construcción conserva toda la tradición y autenticidad de la original, por supuesto, acondicionada con todas las comodidades del siglo XIX. Nunca había dormido en una masería trullo y la experiencia fue simplemente excepcional.
La decoración de todas las habitaciones y zonas comunes está dedicada al arte de la cetrería, de la cual deriva también el nombre del porpio hotel “la corte del azor“. Francesco, el propietario del resort y amante de los animales, me enseñó algunas de las habitaciones y todos los servicios que ofrecían. Las habitaciones son realmente para quedarse con la boca abierta, cada una de ellas lleva el nombre de un halcón, por ejemplo la habitación Nibbio, dedicada a uno de los halcones más habituales en la zona de Puglia. En dicha habitación, una de las suite, hay una baño turco ¿pero que más se puede pedir? ¿auizá un jacuzzi? Pues dicho y hecho ya que en la Corte dell’Astore también hay dos habitaciones que cuentan con su propio jacuzzi, algo que me pareció original y a la vez excepcional. La ambientación en las habitaciones es maravillosa, los revestimientos de piedra, los detalles y la decoración con frescos que harían las delicias de cualquier aficionado al arte.
Mi habitación en La Corte dell’Astore: Il Girfalco
El nombre de la habitación en la que me alojé, Girfalco, hace mención a uno de los halcones más bellos y grandes que existen. Estaba reservado a la nobleza e, incluso, a los reyes. Por ello en la habitación, además de la imagen afrecada de este precioso animal, hay un recuerdo a Federico II monarca aficionado al arte de la cetrería. En una de las paredes estaba dibujado a modo de fresco el castillo Castel del Monte y un precioso sol dorado que con la luz de la mañana creaba un ambiente inigualable. El Castillo de Santa María del Monte, también en la provincia de Bari, fue uno de los más importantes en la época del monarca y por ello aparece representado en uno de los laterales de la habitación. La composición con el gran sol dorado es impactante, parece como si ese gran sol iluminase toda la estancia.
Mi habitación tenía unas escaleritas con el Girfalco presidiendo que conducían a la parte superior en la que estaba una zona “noche”, una pequeña cocina con todo lo necesario y el baño. Pero, junto con el sol de la pared, lo mejor de la habitación es que disponía de mi propia terraza desde donde poder ver el amanecer rodeada de olivos y trulli. La habitación era muy confortable, bien acondicionada, ya que aunque yo pensaba que en enero no haría frío en Publia lo hacía. Por la noche al bajar la niebla la temperatura del exterior también descendió bastante, sin embargo en la habitación todo era calidez. Ni que decir tiene que la cama era comodísima y dormí como un angelito en toda aquella inmensidad para mí solita.
La habitación contaba con todo tipo de detalles decorativos como los preciosos lavabos y fregaderos de piedra, un armario tallado en madera o el cabecero de la cama, todo ello fruto del trabajo de artesanos locales. Los detalles rústicos y tradicionales y el mimo con el que están elegidos proporcionan un toque exclusivo y auténtico al hotel dificil de encontrar en las grandes cadenas hoteleras. Una autenticidad que por lo que conocí a sus propietarios era el vivo reflejo de su pasión por la tierra y por su hotel.
Los servicios del hotel
El resort además de los servicios de algunas habitaciones como jacuzzi o baño turco, cuenta con una sala acondicionada para los masajes y el relax. Además en la parte inferior de la masería hay un espacio bar y una sala de relax, decorada con una imagen del famoso rey svevo. Por cierto, el desayuno también lo sirven en la habitación, un desayuno completo en el que eres tú el que eliges lo que quiere tomar, dulce, salados, zumos y café, una delicia servido a la hora que tú decidas. La verdad, me trataron tan bien en este hotel…
La Cortel dell’Astore tiene una fuerte responsabilidad con la fauna, son amantes de los animales y de la cetrería. ¿Sabes de que hablo? La cetrería es el arte de la caza tradicional con halcones, que en la zona de Puglia se remonta a la época del rey suevo Federico II. El rey Federico II de Svevia (1194 – 1250), rey de Sicilia y Emperador del Sacro Imperio romano fue un apasionado del arte de la cetrería, además de otras artes y pasiones culturales como la literatura. Promocionó las artes y protegió a numerosos artistas y eruditos, incluso se cuenta que el propio rey llegó a hablar seis idiomas.
¿Cómo llegar y dónde encontrarlos?
La ubicación de este hotel es perfecta para visitar tanto Alberobello como su comarca y el Valle de Itria. Descubrir los trulli y descansar en un lugar como este es un auténtico lujo para el viajero. Si quieres contactar con La Corte dell’Astore puedes hacerlo a través de su web o de sus redes sociales:
Dirección: Via 7 Liberatori D. Selva, 8, 70011 Alberobello BA, Italia
En facebook podéis encontrarlos en su fan page: https://www.facebook.com/lacortedellastore/
Y podéis ver más fotos en su página de instagram: https://www.instagram.com/lacortedellastore/