Hace poquito que volvimos de Tenerife y ya estamos deseando volver. Nos gustó la isla, nos gustó su gente, sus playas y sus paisajes, nos gustó ¡todo! Por todo esto te contamos y te recomendamos la ruta que hicimos por el norte de Tenerife aprovechando que nuestro hotel se encontraba al final de la misma. ¿Te vienes al Norte de Tenerife uno o dos días?
* Probablemente si quieres hacer una parada en todos los lugares del post tendrás que utilizar dos días o más, las distancias no son muy grandes, por lo que o bien puedes buscar un alojamiento a mitad de camino o hacer alguna ruta adicional. Las carreteras son de montaña, los kilómetros se tardan en recorrer, aunque todo está muy cerca la carreterá te tomará bastante tiempo. Disfruta mucho del viaje, no te apresures, de eso se trata esta isla.
Ruta por el Norte de Tenerife
Tuvimos la suerte de llegar muy pronto a Tenerife y ponernos rápidamente en marcha gracias al coche de alquiler que nos proporcionó GoldCar. Salimos con nuestro Polo super completo, con todos los extras, del Aeropuerto de Tenerife Norte (Los Rodeos) y nos dirigimos a la autovía que corre paralela a la carretera de entrada/salida del propio aeropuerto. La autovía TF-5 que recorre la isla por el norte estaba atestada de tráfico, sobre todo en sentido contrario al nuestro, es decir, hacia La Laguna y Santa Cruz de Tenerife. Recorrimos unos 30 kilómetros para llegar a nuestra primera parada: La Orotava.
La Orotava, qué ver en unas horas
Tenía muchísimas expectativas puestas en la visita a La Orotava y sinceramente no me defraudó, sin duda el pueblo más bonito del Norte de Tenerife. En este post hago un breve repaso por los lugares más interesantes que vimos, pero bien merece un post aparte ya que La Orotava merece una visita de un día, no solo para disfrutar de todo lo que hay que ver sino también para degustar la gastronomía de la zona, comer en alguno de los restaurantes tradicionales o en algún Guachinche.
Si tienes tan solo dos o tres horas para ver La Orotava te aconsejo que vayas directo al centro histórico, allí encontrarás un parking para dejar el coche sin tener que dar vueltas y podrás hacer un recorrido a pie por los lugares más emblemáticos. Nosotras empezamos recorriendo la calle principal (Calle del Calvario que prosigue en la Carrera del Escultor Estévez), para llegar a los Jardines de la Quinta Roja y para visitar el Jardín de la Victoria. Las vistas desde estos jardines son las mejores de la zona, se extienden desde el Teide hasta el mar, un valle salpicado de localidades y con cúpulas que resaltan con sus colores por encima de las casas. Realmente muy bonito, no solo por las vistas sino por la vegetación de estos jardines. Una de las plantas que más me gustó fue la Strelitzia o “flor pájaro”, típica en zonas cálidas, o incluso como otros la llama del paraíso. Muy aconsejable echar un vistazo al interior del Liceo Taoro, donde se sitúa la sociedad cultural del mismo nombre, un lugar de referencia para las actividades de la localidad, su decoración decimonónica nos recordó a algunas series televisivas.
Volvimos a la calle principal para echar un vistazo a la arquitectura típica de la zona representada por las magníficas casonas nobiliarias construídas en los siglo XVII y XVIII como la Casa de los Balcones. Es la más conocida pero hay otras casas que nos llamaron la atención como la Casa de Eladia Machado, la Casa Lercaro o La Casa del Capitán. Además de estas casas nobles también hay un importante espacio para la tradición y la vida cotidiana en las Islas Canarias, con lugares dedicados a la artesanía o a actividades como la molienda en los Molinos de Agua.
La arquitectura religiosa también tuvo su importancia en La Orotava, los edificios más importantes son la Iglesia de la Concepción, con su imponente fachada barroca con grandes columnas de piedra (en su interior está el Museo de Arte Sacro), la Iglesia de Santo Domingo uno de los conjuntos tradicionales más significativos de la localidad que acoge el museo de artesanía iberoamericana, o las Iglesias de San Agustín y de San Juan Bautista.
Puerto de la Cruz: playas y actividades para todos
Puerto de la Cruz se encuentra a las faldas del Valle de la Orotva, justo debajo de Los Realejos y La Orotava. Su origen era un pequeño pueblo marinero que poco a poco fue dando lugar a un gran centro turístico que en algunas de sus calles no ha perdido el sabor tradicional. Lo que destaca de este lugar tan turístico es sin duda la oferta de ocio que ofrece a los turistas, sobre todo si viajas con niños en un lugar para pasar el día gracias a el espectacular Lago Martiánez y al Loro Parque. Puerto de la Cruz fue uno de los primeros lugares de Canarias considerado de Interés Turístico Nacional en 1955 cuenta con un interesante centro histórico con numerosos edificios protegidos donde es siempre agradable el paseo.
Pero además cuenta con algunos atractivos como las piscinas naturales, las de San Telmo y artificiales, el conocido Lago Martiánez. Este famoso complejo cuenta con algunas de las mejores piscinas de Europa, un lugar para disfrutar de las actividades al aire libre y el ocio. Otro de los lugares más famosos de Puerto de la Cruz es el Loro Parque, nosotras no fuimos, pero hace las delicias de los más pequeños y de eso tenemos mucha constancia.
Icod de los Vinos y Garachico
Volvemos a la carretera por la TF-5 y nos encaminamos a Icod de los Vinos y Garachico. El famoso Drago Milenario, Monumento Nacional desde 1917 nos espera en el municipio de Icod de los Vinos, la historia cuenta que tiene más de ocho siglos de edad, siendo el más antiguo de las islas. En Icod hay algunas de las mejores vistas al Teide de toda la isla de Tenerife, su imponente figura se eleva más de 3.000 metros, es el pico más alto de España. Icod tiene un pequeño y bonito centro histórico, muy fácil de recorrer a pie, en el destaca la arquitectura tradicional de las islas con casonas nobles como la Casa de los Cáceres, que data del siglo XVIII y tiene un precioso patio central porticado desde donde se accede a las diferentes estancias del edificio. Icod cuenta con un buen numero de edificios religiosos, entre ellos destacan la Iglesia de San Agustín y el Ex Convento de San Francisco, acompañados de numerosas ermitas, como las de San Antonio, El Calvario y las Angustias; y el museo de Arte Sacro.
Garachico es un pequeña localidad situada al borde del mar que prácticamente fue destruida en 1706 por la erupción del volcán que lleva el mismo nombre. Su reconstrucción a partir del siglo XVIII ha dado pie a un bonito y pintoresco pueblo en el que hay numerosas construcciones religiosas, civiles y militares. Una de las cosas más curiosas de este pueblo es la importancia que se le ha dado a la escultura que puebla casi todos sus rincones, hay obras dedicadas a las Pescaderas, al Pez, al Vino o al Emigrante y numerosos bustos que representan a personajes significativos para Garachico.
No te vayas de esta zona sin probar algunos de los vinos de sus uvas malvasía. Y tampoco sin disfrutar de las vistas de alguno de los miradores, como el del Guincho, que ofrece una bonita vista panorámica sobre Garachico.
Santiago del Teide, Masca y las montañas
Subimos por la carretera serpenteande a un ritmo tranquilo, tampoco se puede conducir a más por estas carreteras no aptas para mareos. Me gusta bastante este tipo de conducción, no suelo ir rápido y disfruto mucho de los paisajes. Vamos a atravesar la isla ya que nuestro hotel se encontraba en la Puerto de Santiago, en las faldas de la ladera contraria a Icod y Garachico.
Santiago del Teide es uno de los municipios más altos de la isla, señala el paso del Norte de Tenerife a la zona sur, menos escarpada. Uno de sus principales atractivos es su entorno natural, además de algunas construcciones típicas como la casa del Patio una típica casona canaria del siglo XVII, en la que hoy se ubica un bonito hotel rural. Sin embargo, lo mejor de la zona son las vistas, aquellas que se abren a los grandes parajes naturales y montañosos de las laderas del Teide por un lado y los acantilados sobre el Océano por el otro. Nos gustó mucho parar a hacer fotos desde los miradores de la carretera. Al llegar a la población de Santiago del Teide hay una pequeña carretera que conduce a Masca. Masca es uno de los lugares más bonitos de la isla de Tenerife, sobretodo por su abrupto terreno que desemboca en imponentes acantilados sobre el Atlántico. La arquitectura de este pequeño caserío conserva la tradición rural de la zona, por desgracia sufrió un importante incendio hace diez años que destruyó buena parte del pueblito y del entorno natural.
Una de las actividades más atractivas de esta zona es el trekking desde Masca hacia los acantilados y viceversa. Muchos operadores turísticos ofrecen esta actividad con una duración de tres o cuatro horas, una ruta de senderismo que ofrece unas vistas magníficas con salida desde el Puerto deportivo que está justo al lado del acantilado de los Gigantes.
El acantilado de los Gigantes y las actividades en el océano
De vuelta a la carretera descendemos hacia Puerto de Santiago, municipio en el que se encuentran el Acantilado de los Gigantes, una de los espacios naturales más espectaculares de la isla de Tenerife. El Acantilado abre sus imponentes paredes de roca sobre el Atlántico, con unas alturas de vértigo y una profundidad rica en vida marina en la que es habitual llevar a cabo actividades de submarinismo.
Estuve dos días en el Acantilado creo que es una de las vistas más espectaculares del Norte de Tenerife (tengo que decir que tengo dudas de que sea norte…), una de las mañanas que pasé en Puerto de Santiago hice una pequeña ruta a pie de una hora desde el hotel hasta la playa los Guíos, atravesando toda la costa del municipio y el Charco de los Cangrejos y las piscinas naturales llamadas de los Gigantes. Al día siguiente, volvimos pero esta vez fuimos en coche para hacer algunas fotografías y disfrutar de un paseo por el puerto deportivo. Si tienes tiempo te aconsejo que eches un vistazo a las rutas que se hacen desde el puerto deportivo, hay actividades de buceo, avistamiento de delfines y otros animales marinos, excursiones con submarinismo y combinados de mar y trekking hacia Masca.
Como veis hay muchísimo que ver y hacer en esta ruta por el Norte de Tenerife, nosotros estuvimos cuatro días en la zona, por lo que el tiempo exacto que se tarda en ver todo no te lo podemos asegurar, pero podrías hacerlo en un par de días. Si te gusta además la gastronomía, la playa y disfrutar del entorno, te recomiendo que planifiques bien tu visita para poder hacer actividades como el senderismo o las playas de la zona.