Ciudad del mes: febrero en Fez

Cuando en la Península hace frío lo que nos gusta es elegir destinos más cálidos para disfrutar de mejor tiempo y que mejor que un paraíso a poco más de una hora desde Madrid (y otras ciudades de España). Por eso, para el mes de febrero, hemos pensado que la ciudad ideal es Fez, una ciudad Patrimonio de la Humanidad en Marruecos.
Viaje a Fez en Febrero

Fez

¿Cómo llegar?

Fez es un paraíso muy cercano, desde España es facilísimo llegar gracias a los vuelos regulares que algunas líneas aéreas como Ryanair han abierto en los últimos años. El aeropuerto de Fez está a unos 15 km del centro de la ciudad por lo que es bastante cómodo y económico llegar desde allí. Hay varias formas para llegar a la ciudad, la más económica el autobús, por menos de 2 euros (unos 20 dirhams), no es una línea de autobús en sí, sino un transporte directo. Otra opción muy asequible es la de tomar un taxi, no cuesta más de 7 u 8 euros.

Datos básicos

Fez es una de las ciudades más grandes de Marruecos, tiene casi dos millones de habitantes, por lo que no es precisamente una ciudad pequeña. La ciudad tiene varias zonas, la más antigua Fez el-Bali, que está rodeada de murallas y donde se encuentra la Medina. La parte llamada Fez el-Jdid es más nueva y allí se encuentran los principales lugares del barrio judío como la sinagoga, por último la Ville Nouvelle, que es la zona francesa de la ciudad. Fez es una ciudad patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por lo que es considerada uno de los atractivos turísticos más importantes del país.

Imprescindibles

* La Medina Fez el-Bali, es una de las que mejor se conserva en el mundo y es un auténtico laberinto de calles y gentes, también es viajar al pasado ya que vas a encontrar desde burros para el transporte a toda clase de mercancías.

* El Palacio Real es un referente en la cultura marroquí, se construyó en el siglo XVI y es uno de los más importantes, grandes y antiguos de Marruecos. La única pega es que no se puede visitar el interior.
* Las mezquitas de la ciudad son otros de esos lugares que no te puedes perder, las más interesantes las de Karaouine y la de los Andaluces. Son los edificios más antiguos de la ciudad, se remontan al siglo IX y tienen un pasado legendario.

* Al igual que en Marrakech una de las visitas más significativas son las tumbas, en este caso las Merenides, que se encuentran en el exterior del viejo Fez.
* Las vistas, como en otras ciudades del país las panorámicas sobre la medina y la ciudad que se pueden observar desde algunas terrazas y azoteas son espectaculares.

Gastronomía


Nos encanta la comida marroquí
en Fez puedes encontrar todo tipo de gastronomía, desde la alta cocina en restaurantes de lujo hasta los puestos de mercado con los platos más sabrosos y tradicionales de su cultura. Si no te quieres perder el mejor plato de la ciudad tienes que probar la pastella (o pastilla), una especie de empanada de hojaldre rellena de carne de pollo, ternera… El cuscús es otro de los platos estrella de la cocina del país, pero hay otros muchos como la harira, los postres a base de frutos secos o dátiles, los feqqas o los shebbakia. Y no os olvidéis de las aceitunas, multitud de variedades y sabores que harán las delicias de los afición

Consejos TIPs


* Piérdete y sobrevive en la Medina de Fez, a posta o sin hacerlo a propósito, es la mejor forma de descubrir los lugares escondidos y disfrutar de ellos.

* Los zocos y los mercados de la ciudad son siempre una buena oportunidad para el arte del regateo, del que yo no gozo, puedes encontrar productos a muy buen precio, artesanía típica, objetos de decoración y textiles muy convenientes.
* Si te apasiona el arte esta ciudad está llena de palacios y de museos, desde los dedicados a las armas al Museo Nejjarine de Arte. Sin olvidarnos del Museo Batha o el Palacio Glaoui.
* También hay espacio para los jardines y las fuentes donde descansar del intenso recorrido por la medina, los más famosos de Jnan Sbil, además son los más antiguos de la ciudad y es un lugar con acceso gratuito.
* Alójate y duerme en un Riad, son los “hoteles” tradicionales, están situados en casas típicas y gozan de una buena cocina. Algunos tienen preciosas terrazas para ver la ciudad, piscinas o estanques en el centro del patio y todo tipo de lujos y sencilleces.
* Las curtidurías de la ciudad son una de las imágenes más famosas de la urbe, si las visitas vete preparado para los olores de este lugar.

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